Los pescadores artesanales de Quintero enfrentan una crisis operativa debido al alto tráfico de buques industriales y la presencia de contaminantes en el área. La falta de seguridad en la navegación y la desconfianza sanitaria han reconfigurado el oficio en la bahía.
Por: Leonora Gaete

Riesgos operativos y desconfianza sanitaria en la bahía
La actividad portuaria en Quintero ha desplazado a la pesca artesanal, obligando a las embarcaciones menores a maniobrar entre buques de gran calado. Según el dirigente Hugo Poblete, la navegación es “súper compleja y peligrosa” por la presencia constante de naves industriales. A este riesgo se suma la preocupación por los metales pesados en el fondo marino y las restricciones de la Ley de Pesca, factores que han forzado a los pescadores a concentrar su producción casi exclusivamente en la jibia para mantener la rentabilidad.
La desconfianza sanitaria es otra problemática que el sector de pescadores artesanales de Quintero debe enfrentar a diario. Aunque mantienen la extracción de recursos marinos, existe una conciencia latente sobre la presencia de contaminantes en el fondo marino.
“Sabemos que no deberíamos estar comiendo porque los últimos estudios siempre han revelado que hay una alta concentración de metales pesados”.
Hugo Poblete, sindicato de pescadores S-24
Esta realidad genera una contradicción vital en la caleta, donde los propios pescadores admiten sentir incertidumbre al consumir los mariscos que capturan, evidenciando el impacto profundo de la polución en su seguridad alimentaria y calidad de vida.
Ante la falta de prevención estatal, los pescadores han tenido que vigilar ellos mismos el medio ambiente de la bahía. Hugo Poblete denuncia que el Estado actúa de forma reactiva, lo que los llevó a presentar demandas y recursos de protección a lo largo de los años. Esta lucha resultó en el fallo de la Corte Suprema (Rol N° 5.888-2019), que obliga a las autoridades a identificar los contaminantes y proteger la salud de la población.
Vigilancia ambiental y la incertidumbre por el futuro del sector
A pesar del entorno adverso, los pescadores artesanales aseguran estar hoy “mucho mejor preparados” que otras comunidades costeras. Han desarrollado estrategias de presión y organización que les permiten actuar con rapidez ante desastres medioambientales. Sin embargo, el futuro político genera incertidumbre en la caleta. Poblete expresa su temor ante las nuevas políticas de gobierno que puedan priorizar el crecimiento económico desenfrenado por sobre la protección de los recursos, señalando que:
“Probablemente van a pasar la aplanadora en proyectos que se han detenido por décadas, como el proyecto dominga”.
Hugo Poblete, sindicato de pescadores S-24.



Conoce las zonas críticas de contaminación y las caletas afectadas en este Mapa Interactivo: Impacto Industrial en Quintero.
